Pocas veces tomo ómnibus desde que empezó la pandemia, sobre todo para alguna cita médica ineludible. Ya narré que la línea 60 de Cutcsa va con las unidades llenas hasta los topes, con el pasillo lleno de personas de pie, muchas de ellas con la nariz destapada. Hoy tuve que tomar un 163, la unidad 259, a las 10:30 de la mañana. Del otro lado del pasillo un pasajero iba con la nariz destapada y le señalé que debía tapársela. Hizo caso omiso de mi indicación, y le pregunté al conductor por qué no le indicaba a los pasajeros que usaran la mascarilla adecuadamente. Su respuesta fue “ no me pagan para eso, no soy empleado de la intendencia”. Y agregó que si no me gustaba tomara un taxi. Luego me desafió a denunciarlo si no estaba conforme con su actuación. No contento con eso, cuando vio a un inspector en una parada le dijo “Che Castillo, acá hay uno que tiene una queja”. Le dije al inspector que había pasajeros con la nariz destapada, a lo que me contestó que eso no podía s...